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La Presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Katia Uriona Gamarra, indicó que no sostuvo ninguna conversación telefónica con el presidente del Senado, Milton Barón, en el marco de la discusión y tratamiento en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) del Proyecto de Ley de Organizaciones Políticas.
Uriona indicó que el viernes, el TSE recibió una carta firmada por la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño, en la cual se manifestó la apertura y disposición de la ALP para tomar en cuenta las observaciones del Tribunal Supremo Electoral respecto al artículo 29 y las disposiciones transitorias modificadas en esta instancia al Proyecto de Ley de Organizaciones Políticas.
Asimismo, la Presidenta ratificó que el TSE expresó su criterio en relación a las modificaciones inconsultas realizadas en la Comisión de Constitución de Diputados al Proyecto de Ley, a través de un Comunicado público difundido el día jueves 23 de agosto.
En ese marco, la presidenta Uriona lamenta que no se respete el espíritu del Proyecto de Ley de Organizaciones Políticas, elaborado después de un largo y plural proceso de construcción y que tiene como uno de sus principales objetivos la profundización de la democracia interna en las organizaciones políticas en el país. En su criterio, algunos cambios realizados pondrían en riesgo el alcance de la norma en términos de la propuesta originalmente planteada por el TSE, en un contexto en el que se pueden profundizar las tensiones políticas que vive el país.
Asimismo, la Presidenta ratificó que el TSE expresó su criterio en relación a las modificaciones inconsultas realizadas en la Comisión de Constitución de Diputados al Proyecto de Ley, a través de un Comunicado público difundido el día jueves 23 de agosto.
En ese marco, la presidenta Uriona lamenta que no se respete el espíritu del Proyecto de Ley de Organizaciones Políticas, elaborado después de un largo y plural proceso de construcción y que tiene como uno de sus principales objetivos la profundización de la democracia interna en las organizaciones políticas en el país. En su criterio, algunos cambios realizados pondrían en riesgo el alcance de la norma en términos de la propuesta originalmente planteada por el TSE, en un contexto en el que se pueden profundizar las tensiones políticas que vive el país.