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En cuanto al tomo IV del Atlas Electoral de Bolivia, el vocal Exeni, explicó que es un documento valioso porque “estuvimos más de cinco años sin estadísticas electorales en el país y porque presenta datos muy valiosos que nos revelan muchas cosas sobre el comportamiento electoral, el sistema de partidos, las reglas electorales y el modo en que ha ido modificando nuestro sistema presidencialista”.
Además tiene un componente de geografía electoral, pues los datos numéricos y porcentajes de cada proceso electoral o referendario vienen acompañados de mapas que retratan los resultados electorales.
“A veces no basta ver el dato y se requiere una referencia visual de cómo se ha votado y cómo han ido variando las votaciones, dónde un partido ha tenido más o menos votación, si hubo o no polarización. Esto es muy valioso porque se puede ver qué partido u organización política ha ganado en cada departamento y cómo ha votado la población con mapas desagregados por provincia y municipio”, subraya Exeni.
Una novedad del tomo IV es que incluye datos de la primera elección judicial de la historia democrática, del primer referendo de reforma constitucional de febrero de 2011 y de los primeros referendos aprobatorios de estatutos y cartas orgánicas, que son procesos nuevos e inéditos. Asimismo, da cuenta de las elecciones generales 2015 y subnacionales 2015 en las que se ponen en práctica las nuevas directrices electorales y las leyes del Órgano y del Régimen electoral.
El TSE imprimió 1.000 ejemplares del tomo IV del Atlas electoral, que serán distribuidos con prioridad a centros de información, investigación y formación académica, además de bibliotecas, municipios, gobernaciones y entidades nacionales que trabajan con la temática.
Además tiene un componente de geografía electoral, pues los datos numéricos y porcentajes de cada proceso electoral o referendario vienen acompañados de mapas que retratan los resultados electorales.
“A veces no basta ver el dato y se requiere una referencia visual de cómo se ha votado y cómo han ido variando las votaciones, dónde un partido ha tenido más o menos votación, si hubo o no polarización. Esto es muy valioso porque se puede ver qué partido u organización política ha ganado en cada departamento y cómo ha votado la población con mapas desagregados por provincia y municipio”, subraya Exeni.
Una novedad del tomo IV es que incluye datos de la primera elección judicial de la historia democrática, del primer referendo de reforma constitucional de febrero de 2011 y de los primeros referendos aprobatorios de estatutos y cartas orgánicas, que son procesos nuevos e inéditos. Asimismo, da cuenta de las elecciones generales 2015 y subnacionales 2015 en las que se ponen en práctica las nuevas directrices electorales y las leyes del Órgano y del Régimen electoral.
El TSE imprimió 1.000 ejemplares del tomo IV del Atlas electoral, que serán distribuidos con prioridad a centros de información, investigación y formación académica, además de bibliotecas, municipios, gobernaciones y entidades nacionales que trabajan con la temática.